El Ayuntamiento ha comenzado las obras de estabilización de la ladera sobre el Peine del Viento, con la previsión de que para el mes de agosto pueda ser abierto de nuevo al público.
El concejal de Proyectos y Obras, el socialista Enrique Ramos, ha explicado que los trabajos tienen un presupuesto cercano a los 700.000 euros y disponen de un plazo de tres meses de ejecución. "La empresa nos ha garantizado que se cumplirán los plazos, si hiciera falta utilizando un doble turno de trabajo. Por tanto, podemos asegurar que el Peine del Viento se reabrirá el primer martes de agosto, día 2", ha dicho Ramos.
El conjunto se reabrirá con un vallado provisional en los tres metros más próximos a la pared del acantilado, en espera de que se concrete en los próximos meses, por parte de las familias Chillida y Peña Ganchegui, una solución técnica «armoniosa» para alejar a los visitantes del talud rocoso. Los herederos del legado de los artistas que diseñaron el Peine del Viento rechazaron, por su impacto, el cierre disuasorio que planteaba el proyecto municipal y que consistía en una hilera de barrotes de acero para impedir a los visitantes acercarse al flysch rocoso.
El Ayuntamiento está a la espera de que las familias de Chillida y Peña Ganchegui presenten un proyecto alternativo de cierre para los 40 metros más cercanos a las esculturas y mientras tanto avanzará con el resto de la obra de estabilización del acantilado.